13 de abril de 2009

HISTORIAS DE HIDE EN LA SERENA (II)

Hola a todos: es verdad, tengo muy poca actividad últimamente. Se juntan dos circunstancias: por una parte, tengo muy poca actividad, sin más; por otra, tengo poco tiempo para compartir esa actividad. En estos últimos tiempos he estado de vacaciones y, a pesar de ello, poco tema... Bueno, algo os contaré un día de éstos. Pero hoy, de momento, compartiré la segunda de mis sesiones de hide en Castuera, en busca de la avutarda perdida... Y nunca mejor dicho, ¡porque el viernes santo fue uno de los días más largos de mi vida! Allá nos metimos, Alvaro Vidal, Jonathan Díaz Y Viçens (¡Mierda, Viçens, perdona, no me acuaerdo de tu apellido!) y yo (cada uno en un hide, todos individuales), a pasar el día entero, con la misma esperanza a pesar de la mala pinta que tenía el día. Nada comparable con lo que resultó ser, un día de perros con lluvia intermitente y viento fuerte que no cesó ni un momento. El dolor de cabeza al final del día fue horrible, y lo peor fue, naturalmente, que las avutardas apenas hicieron acto de presencia. En fin, un día muy duro del que, a pesar de todo, aprendí muchas cosas que quiero compartir:
1) Conocí a la collalba gris, un pequeño pajarito migrador, que cruza océanos sin repostar ni nada, y que fue de los pocos que me animaron un poco aquel día.
2) Leí un buen rato, cosa que hacía mucho tiempo que no hacía con calma y detenimiento. Un placer para recordar. No hay mal que por bien no venga.
3) Siempre debe llevarse ropa de abrigo, de más. Al fin y al cabo, la mayoría de las veces caminamos menos de un kilómetro, bien podemos cargar con el equipo. Yo iba casi como en pleno invierno, y aún así pasé frío. Algunos de mis compañeros iban casi como en verano...
4) El trabajo de ANSER está siendo excelente, y no me quejo en absoluto, como deportista que he sido siempre, hace mucho tiempo que sé que unas veces se gana y otras se pierde. No obstante, mi pequeña reflexión personal sobre el uso de los hides "institucionales": La gran ventaja es que te dan gran parte del trabajo hecho, no necesitas investigar, explorar, pasar horas en el campo cuando no dispones de ellas. La gran desventaja es, recisamente, la misma: ganas tiempo, pero la mejor parte se queda sin hacer. De un tiempo a esta parte, a pesar de mis pocas salidas al campo, disfruto explorando y aprendiendo por mi cuenta... En fin, creo que la clave está en combinar ambos sistemas. Yo, desde luego, siento que este par de días me ha aportado mucho, como véis.
Bueno, y el sábado todavía nos deparaba alguna sorpresilla: estuvimos en lo alto de un silo abandonado, en Quintana de la Serena, y desde allí teníamos acceso a dos nidos de cigüeña a escasos dos metros, cernícalos primilla, estorninos y gorriones. la cigüeña blanca parece muy común, pero tenerla tan cerca y poder observar sus movimientos es muy emocionante, aunqeu luego no sepas aprovechar la jugada fotográficamente.
En fin, amigos, aquí os dejo unas pocas fotos de cómo transcurrió este par de días, incluído un autorretrato muy romántico. Un saludo.

3 comentarios:

  1. Si que se aprende algo siempre, eso es cierto, de momento me has enseñado un "hide" por dentro y tu autoretrato está genial. Espero que Victor cuando vea las fotos no le entre el gusanillo de probar una aventura así porque ya lo que me faltaba (no por favorrrrr)
    Creo que para esto hay que valer, porque santa paciencia! y la de ropa que llevabas??? y pasaste frio??? alucino.
    Esto es como lo de la visa cuñao:
    Pasar un día en un hide: 60 euros
    Silla one man hide: 70 euros
    Equipo fotográfico: 3.000 euros
    Ropa para la ocasión: 200 euros
    Mear en una botella de aquarius: NO TIENE PRECIO
    No digas que noooooo

    Eres un crack Rafa! Preciosas las fotos, no se porqué pero la del mochuelo me gusta, tiene una luz muy bonita.
    Muaks

    Soledad

    ResponderEliminar
  2. ¡Hombre, Rafa, qué placer encontrarse en estas páginas! Hace ya casi un año que nos encontramos en Monfragüe.

    Bonitas fotos las que has hecho en ese hide de la Serena. No podía ser menos tratándose de tí y de esa comarca (yo nací, precisamente, en Villanueva de la Serena).

    Algún día tengo que solicitar vez para uno de esos hides, a ver si tengo tanta suerte como tú.

    Un abrazo. Luis M. Cuaresma.

    P.D. Por cierto, te invito a que visites mi blog, donde enlaceré el tuyo. Es más sencillo que éste por falta de conocimientos y tiempo, pero...

    www.luismcuaresma.blogspot.com

    ResponderEliminar
  3. Hola Rafita!! Vaya dia chungo que os pegasteis, pero envidia me das!! Estas muy guapeton ahi dentro del hide con la artilleria...un abrazo!!

    ResponderEliminar